El proyecto europeo ROBIN, financiado por el programa Horizonte Europa, finaliza este mes de agosto tras haber contribuido a mejorar la gobernanza o gestión pública de la Bioeconomía Circular en Europa desde Andalucía.

Los socios andaluces que han liderado la aportación regional al proyecto ROBIN son la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural (CAPADR) de la Junta de Andalucía, el Instituto Andaluz de Investigación y Formación Agraria, Pesquera, Alimentaria y de la Producción Ecológica (IFAPA) y CTA (Corporación Tecnológica de Andalucía).
El proyecto europeo ROBIN ha impulsado modelos de gobernanza innovadores en Bioeconomía Circular para ayudar a las administraciones regionales europeas a acelerar la transición verde. Andalucía es una de las cinco regiones piloto de la UE que han participado este proyecto ROBIN para promover estos nuevos modelos de gobernanza innovadores que ayuden a impulsar la Bioeconomía Circular, junto a Baden-Württemberg (Alemania), Central Macedonia (Grecia), Southern Region (Irlanda) y Zilina (Eslovaquia).
Nuevos modelos de gobernanza
El proyecto ROBIN, liderado por el socio griego Q-PLAN, ha ayudado a las autoridades regionales europeas a diseñar estructuras y modelos de gobernanza para acelerar la consecución de sus objetivos en Bioeconomía Circular. Para ello, se han constituido Constelaciones Regionales Multi-actor (MARC por sus siglas en inglés), que involucran a actores clave de la cuádruple hélice para cocrear y colaborar en estructuras de gobernanza novedosas y que estén bien integradas en las ya existentes en las regiones. En el caso de Andalucía, la MARC ha estado integrada por representantes de la Academia, como el CSIC-Instituto de la Grasa y las universidades de Almería y Granada; cooperativas como Ecogestiona y San Isidro de Loja; los consumidores a través de UCAUCE; y empresas públicas como Emasesa y privadas como Tepro, Grupo La Caña o La Canastita.
Una de las grandes aportaciones del proyecto ha sido la elaboración de una caja de herramientas práctica para mejorar el diseño, funcionamiento y monitorización de los modelos de gobernanza de bioeconomía circular, que ahora queda a disposición de aquellas otras regiones que la quieran utilizar, además de las regiones incluidas en el proyecto, que ya las han aplicado y testeado. También se ha elaborado una guía de replicación de la metodología desarrollada y una propuesta de 20 recomendaciones políticas a medida de las necesidades de las regiones europeas (estará disponible en la web del proyecto https://robin-project.eu/).
Durante todo el desarrollo del proyecto, se ha mantenido coordinación con la CCRI-CSO (Circular Cities and Regions Initiative) y otras iniciativas europeas complementarias, con el fin de facilitar la diseminación de los resultados y su replicabilidad, maximizando su impacto.

El proyecto, además, ha sido reconocido a nivel nacional en España en la primera BioCircular Summit con el Premio Estatal Biocircularidad en la categoría de Cooperación Público-Privada.
Papel clave de Andalucía
Andalucía, como región piloto, ha mantenido un papel clave durante todo el desarrollo del proyecto y, de hecho, fue presentada como caso de éxito de modelo regional de Bioeconomía Circular en Bruselas durante la conferencia EuRCBC (European Rural Circular Bioeconomy Conference), un relevante encuentro que sirvió como evento final de 6 proyectos europeos relacionados con la Bioeconomía Circular, entre los que se encuentra ROBIN.
Los socios andaluces del proyecto ROBIN han coordinado además varios eventos destacados durante los 3 años de vida del mismo, como diferentes talleres y un panel en la agenda oficial del Foro Transfiere durante dos años consecutivos, un taller de replicación de la metodología desarrollada por el proyecto en Bruselas, un taller online sobre política regional con representantes de la DG Environment y DG Research de la Comisión Europea, un taller de aprendizaje mutuo en Stuttgart (Alemania), un grupo de trabajo con más de 30 expertos andaluces para cocrear nuevos modelos de gobernanza de la Bioeconomía Circular en la región o una reunión en Sevilla con más de 30 expertos europeos en Bioeconomía Circular.
Andalucía mantiene desde hace años una clara apuesta por la Bioeconomía Circular y ha sido de las primeras regiones europeas en adoptar un modelo de gobernanza específico, en concreto con la Estrategia Andaluza de Bioeconomía Circular (EABC) y con la aprobación del Plan de Acción de Bioeconomía Circular en la Cadena de Valor Agroalimentaria de Andalucía 2025-2030. Asimismo, la Ley de Economía Circular de Andalucía (LECA) establece los mecanismos necesarios para la implementación de las políticas y regulaciones en materia de economía y bioeconomía circular. Recientemente, se ha constituido además el primer Clúster de Bioeconomía Circular en la cadena de valor agroalimentaria, un proyecto “pionero” impulsado por la Junta de Andalucía para fomentar la colaboración, la innovación y la sostenibilidad del sector agroalimentario desde una perspectiva circular.